La vivienda institucional en renta en México despierta el interés de inversionistas y desarrolladores ante las oportunidades que respaldan las tendencias demográficas y sociales, así como la demanda no satisfecha de espacio residencial.

Quienes participan en este naciente mercado, ven en la clase media del país y América Latina una oportunidad para atender a 47% de este segmento de la población, luego de que en nuestro país existen más de 5.8 millones de viviendas rentadas pero en el mercado informal, de acuerdo con estadísticas de CREA.Si bien actualmente el mercado institucional es reducido e inició en 2010, en Ciudad de México, Monterrey y Guadalajara operan activos de multifamiliares que suman aproximadamente 9,838 unidades que representan 16.2% del mercado en la región. Bruno de los Reyes Terán, director de desarrollo en HASTA Capital dice que el crecimiento de este segmento de la población en la última década que se concentra en el grupo de edad de 20 a 34 años, además del aumento significativo de este segmento con educación superior y empleo formal representa un mercado potencial para la vivienda en alquiler.

Esta previsión permite identificar en el mercado mexicano institucional de vivienda 11 proyectos en construcción que agregarán al inventario 2,769 unidades en proceso, lo cual depara un espacio significativo para la expansión y la inversión.Joel Sánchez, operations officer en Green Buildings de la International Finance Corporation (IFC) considera que la expansión de este mercado representa beneficios para la integración de aspectos como las acciones de sustentabilidad, dado que las decisiones de certificación parten de una dirección y son consideradas decisiones que impactan el performance financiero de los proyectos ante inversionistas.

El potencial

El tamaño actual del mercado mexicano es menor comparado con Chile, que actualmente cuenta con activos de multifamiliares que en conjunto operan 38,079 unidades, y ha sido uno de los mercados con mayor velocidad de crecimiento en la región.

“Uno de los desafíos importantes es que los usuarios entiendan los beneficios de vivir en un multifamily. Cada vez vemos más gente que lo que menos quiere es comprar y anclarse a una sola ciudad, dado que quieren tener movilidad por las alternativas que ha abierto el trabajo a distancia”, asegura Fernando Ulacia, vicepresidente de inversiones en CCLA Group que cuenta con 10 proyectos en pipeline y en operación.

Desde su perspectiva es importante mostrar lo sano que puede ser este activo, tal y como ocurre en Estados Unidos donde para usuarios e inversionistas ha mostrado incluso en tiempos de pandemia, ser uno de los mercados inmobiliarios más estables.

La disparidad en la profundidad del mercado nacional y lo alcanzado por el chileno que representa 55.9% del mercado latinoamericano genera oportunidades para inversionistas y desarrolladores.El multifamily opera en 5 países donde existen 46 operadores y lideran el mercado Chile, Brasil y México.Francisco Andragnes, CEO de Homie considera que el efecto puede reflejarse también en usuarios con menores ingresos que los actuales que absorben el portafolio disponible en el mercado.

Más aún, desde su perspectiva la posibilidad puede verse en segmentos de la población de menores ingresos.

“En el desarrollo del mercado es importante la asequibilidad, que el mercado desarrolle alternativas para usuarios con ingresos promedio de 6 a 8 mil pesos mensuales”, concluye Andragnes cuya firma opera 6 mil unidades en México.No obstante, otros retos para el crecimiento de este mercado se ubican en las licencias para su desarrollo y las ubicaciones ante la preferencia de los usuarios de nuevas generaciones interesados en la movilidad laboral.